Imagen de portada: © CESAR ESA

Apenas es media mañana en Estados Unidos, y ya parece que el Sol se quiera esconder. No están en el cielo los cálidos colores del atardecer, y aún así poco a poco se pierde la luz. Se acerca el momento, y de pronto, el suelo se tiñe de plata, con colores fríos y apagados. Al volver a alzar la visa al cielo vemos las estrellas, y donde hace poco estaba el sol, encontramos un enorme agujero negro que parece tragar la luz que queda alrededor.

Aunque parezca sacado de un libro de ciencia ficción, con esas palabras describen el Eclipse Solar de 2017 aquellos que tuvieron la oportunidad de presenciarlo. Y gracias a los esfuerzos de muchos astrofotógrafos, imágenes como la de la European Space Agency nos acercan la experiencia a quienes no pudimos estar ahí. Esta imagen, como toda fotografía, ha sido procesada a gusto del autor, pero es completamente verídica e ilustra con credibilidad lo que ocurrió. Por supuesto, no es un agujero negro tragando luz lo que estamos viendo, si no la Luna rodeada por la corona solar. Todo esto tiene una base científica.

¿Por qué vemos colores plateados en vez de cálidos?

Estamos acostumbrados a ver atardeceres con colores anaranjados, esto se debe a que durante el atardecer, la luz del sol no llega a la superficie de forma perpendicular como lo haría a medio día, si no que nos llega de perfil. Al entrar de perfil, la luz atraviesa muchos más kilómetros de atmósfera, la cual dispersa los colores fríos con menor longitud de onda y solo consiguen llegar los colores anaranjados. Durante el Eclipse Solar, el Sol se encontraba en lo alto del cielo, la luz atravesaba pocos kilómetros de atmósfera, por lo tanto, apenas se dispersa y todos los colores de la luz blanca nos llegan por igual. El tono plateado no es más que la luz blanca perdiendo intensidad a medida que se oculta el Sol. Pero llama la atención porque a nuestro cerebro le resulta muy desconcertante y antinatural ver un atardecer en el que la luminosidad desciende sin que los objetos se tiñan anaranjados.

¿Por qué aparece un agujero negro en el cielo?

Ese agujero negro es en realidad la Luna rodeada por la corona solar, pero, ¿por qué no vemos la Luna?

Corona solar (copyright: NASA)

Durante un eclipse solar, la Luna se encuentra entre la Tierra y el Sol, por lo tanto la cara que vemos desde la

tierra es la cara que no está iluminada, es como intentar divisar una Luna nueva, prácticamente imposible. La luz reflejada en la Tierra ilumina levemente la Luna, pero la corona solar es mucho más luminosa que esta Luna poco iluminada, y nuestros ojos la ven como un oscuro agujero negro. Solo con imágenes HDR podemos ver la Luna al mismo tiempo que la corona solar.

 

¿Qué es la corona solar y porqué no la vemos normalmente?

La corona solar es la capa más externa del Sol, si bien su temperatura es de más de un millón de grados y se extiende a casi un millón de kilómetros de la superficie del Sol, es extremadamente poco densa, millones de veces menos que la atmósfera terrestre y su luminosidad es muy baja. Normalmente no podemos verla porque la luz procedente de la fotosfera (la superficie del sol) es mucho más intensa y la esfera solar ciega nuestros ojos. Pero durante un eclipse solar, la Luna oculta la fotosfera y las maravillas de la corona solar quedan a la vista para que las contemplemos durante unos breves instantes.

#CulturalData

HDR son las siglas en ingles para Alto Rango Dinámico. El rango dinámico es la diferencia de luminosidad entre la zona más clara y la zona más oscura de una fotografía. Cuando en una fotografía exponemos para un elemento muy luminoso, el resto de elementos quedan subexpuestos, se ven negros. De la misma manera, si exponemos para un sujeto muy oscuro, el resto de elementos se verán quemados,  sobreexpuestos, blancos. La solución a esto son las imágenes HDR, que combinan varias fotografías con distintas exposiciones para que después de procesarlas podamos ver, a la vez y en la misma imagen, los objetos claros y los oscuros.

Autoría: Alejandro Romar
Editado por: Probeta Mag